Este otoño me sabe a invierno

Esta mañana ha sido fría , fría , fría... vacía... extraña... dudosa...

Será por que acarreo sentimientos desde hace días que no tengo idea de como manejar y me he dejado llevar por momentos entre uno y otro.

O es el otoño, este otoño en que me siento sola, este otoño con mañanas de aire frío y sol brillante que me recuerdan inviernos alegres, enloqueciendo mi corazón entre recuerdos y nuevas ilusiones...

Llegó un alguien a mi vida... vino a insertarse en las horas y en la cotidianeidad de mis días ya ordenados previamente para estar sola... y ahora no se que hacer con eso.

Lo tiene todo, y tiene nada... cumple con mis deseos y a la vez los ignora sin saber... no se si es porque no le he abierto la puerta o porque en realidad solo esta mirando por la ventana sin querer entrar.

Dice que entre el y yo hay un muro que yo he levantado y no lo deja acercarse, yo pienso en secreto que el no ha estado tan cerca como para saber  si es real ... que no sabe que para tomar mi mano solo basta con acercar la suya y hacerlo.

Aveces todavía recuerdo el pasado... a veces con risa, a veces con llanto seco, otras con desprecio y otras con sabiduría. Y me pregunto cuanto he aprendido y cuando he perdido... cuanto de mi regalé y cuando me queda por dar.

Quiero comprobarlo pero francamente tengo muchísimo miedo, y cuando digo muchísimo, me refiero a mucho miedo de verdad. Un miedo implacable y sordo que vino a instalarse en mi casa sin que lo advirtiera, uno que jamas conocí porque mis miedos anteriores creo que solo eran inquietudes, este es un monstruo que los ultimos meses se ha dedicado a hacer de mi lo que ha querido, y no me ha dejado hacer lo que yo hubiese deseado.

Esta vez, de verdad quedé asustada, y no tengo remedios para eso.

Quiero su vacuna... quiero que alguien venga y le diga a mi miedo... Lárgate!